¿Acaso un refugio frente a esta crisis general del Sistema en que vivimos?
¿Será, tal vez, una crítica sostenida a un mundo que se
deshumaniza día a día?
¿Será un nuevo lenguaje y un nuevo paradigma, una nueva
interpretación del mundo y un nuevo paisaje?
¿Representará una corriente ideológica o política; una nueva
estética, una nueva escala de valores?
¿Consistirá en una nueva espiritualidad, en una acción destinada a
rescatar lo subjetivo y lo diverso en la acción concreta?
¿El Movimiento será la expresión de una lucha a favor
de los desposeídos, de los abandonados y los perseguidos, será la manifestación
de los que sienten
la monstruosidad de que los seres humanos no tengan los mismos
derechos ni las mismas oportunidades?
El Movimiento es todo eso y mucho más…
El Movimiento es la expresión práctica del ideal de
Humanizar la Tierra y es la aspiración de dirigirse hacia una Nación Humana
Universal.
Es el germen de una nueva cultura en esta civilización que se
hace planetaria y que tendrá que cambiar
su rumbo, admitiendo y valorando las diversidades y dando a todo ser humano,
por la dignidad que se merece, por el simple hecho de
nacer, iguales derechos e idénticas oportunidades.
El Movimiento Humanista es la manifestación externa
de los profundos cambios que se están operando en el interior del
ser humano y que son la historia misma: trágica,
desconcertante, pero siempre en crecimiento.
Es una débil voz adelantada que anuncia los tiempos que están
más allá del ser humanoque hemos conocido.
Es una poesía y un arco de colores diversos.
Es un David frente a un insolente Goliat.
Es la suavidad del agua frente a la dureza de la roca.
Es la fuerza de lo débil: una paradoja y un Destino.
Amigos míos, aún cuando no logremos inmediatamente los resultados que esperamos,
esta semilla ya existe y espera la llegada de los tiempos venideros.
Para todos y de corazón a corazón, el deseo fervoroso del cambio
social que se
avecina y la esperanza del silencioso cambio que más allá de toda compulsión, más allá
de toda impaciencia, más allá de toda aspiración violenta, más allá de toda
culpa y de todo sentimiento de fracaso, ya anida en la íntima profundidad de
muchos humanistas.
Buenos Aires - 4 de Enero de 1998 - Estadio Obras Sanitarias