julio 31, 2013

Mitos - Silo



Apuntes de charla informal con Silo
Madrid, 27-03-91

Mitos contemporáneos

Es una confusión decir que el dinero es un mito. El dinero viene desde hace centurias como unidad de cambio y transacción. Pero es el tema de que el dinero produce inmortalidad, puedes multiplicarlo, puedes convertir lo que toques, puedes adquirir la felicidad, es lo que le da valor mítico. No se dice: "¡El dinero me da la inmortalidad!", pero opera como trasfondo.
Ahí tenemos un mito epocal que se está abriendo paso y mundializando. Se trata de un mito mundial que avanzará frente a los mitos regionales aunque se mellará como el filo del acero para avanzar.
Ya vemos este proceso desde los alquimistas. Antes de ellos el oro tenía valor transaccional dado por su escasez o por sus propiedades minerales. Pero ellos dijeron: "Hay otro oro que al producirlo produce transformaciones en uno y convierte todo lo que toca". Luego vemos esas búsquedas de la ciudad de El Dorado en que se buscaba oro, pero también la Fuente de Juvencia.

La función sicosocial

Mientras el mito opera no se lo reconoce como tal, sino como la realidad misma, y como si siempre hubiera sido así. En realidad, cada momento histórico tiene su mito y dura mientras la gente cree en él. Luego viene la devastación y todo parece increíble.
El mito se forma traduciendo el sistema de tensiones de un pueblo que se asienta como imagen y esa imagen es portadora de cargas y conductas sociales. No entran balas mientras el mito opera. Es como cuando alguien está enamorado. Para él esa persona es la que da la felicidad y es única. Es inútil explicar que hay millones que creen a distintas personas como únicas. Al banquero le parecerá interesante el tema por 5 minutos, pero ¿por qué él que es el administrador del mito dejará de creer que es con el dinero que él obtiene todo? Hoy estamos frente a un mito que se mundializa.

Proceso de los mitos

Los mitos aparecen como aislados y representados por distintos dioses en distintos puntos geográficos. Luego esas tribus intercambian y comercian y esos dioses se relacionan hasta llegar a concentrar los dioses, los templos, los tributos, en el mismo espacio geográfico o centro desde donde el mito opera. En la periferia aparecen los profetas que putean contra ese centro, "¡Arrepentíos, que la plata es de los pueblos! ¡La plata no da la felicidad!", pero nadie les cree.
Teóricamente tenemos las cosas claras y consistentes. Pero una cosa es la teoría y otra cosa es la tecnología, es decir, la implementación de la teoría para orientar un proceso histórico.
No es lo mismo largar una imagen con fuerza mítica en un momento que no es oportuno porque se nos caen encima y nos arrasan. Hacer lo que estamos haciendo. que es plegar conjuntos humanos y que desde ahí pueda surgir algo es distinto. No presenta frentes que nos comprometen. Para operar necesitamos esas aglutinaciones. Núcleos que irradien a conjuntos.
No puedes operar con argumentos lógicos donde actúan fuerzas irracionales. Ahí puedes operar con la lógica de las leyes de la transferencia. Lo haces con lógica pero en el mundo de lo irracional. Ahí mueves cargas de un punto a otro, disuelves y traduces tensiones, te metes con lógica en un mundo no lógico.
Otra cosa es hacerlo como factor sicosocial que es donde entran a operar los mitos. La sociología no es una ciencia, nosotros tenemos otra forma de operar sicosocialmente.
Es un riesgo largar una imagen muy concreta. Esto tienes que hacerlo en el momento oportuno. Cuando el medio está a punto y cuando los nuestros han llegado al nivel de complot y de comprensión adecuado.
Quien ha visto a través de la Historia, la Historia desde adentro, que conoce las compulsiones históricas y las contribuciones de los pueblos y se le hace evidente que la Historia no es un caos sino que tiene dirección y sentido, uno siente o cree que tiene que hacer algo.




julio 21, 2013

¡Despierta y levántate! - Silo

La arenga prohibida


En Jujuy estaba programada una nueva arenga de Silo. 
El paraje elegido fue en esa ocasión, Yala.
A pesar de la autorización dada con anterioridad, se retiró el permiso a último momento justificando tal
proceder por el «estado de sitio» que regía en esos momentos.
La radio y la prensa de Jujuy habían emitido sus comunicados exhortando a la población a no concurrir a
la arenga.
Esa tarde del 20 de julio, comenzó la peregrinación hacia el lugar, distante 16 Km. de la ciudad capital.
Los colectivos eran desviados y se persuadía a la población en la plaza principal a fin de que no subiera
a dichos medios de transporte.
Desde  la Quebrada  de  Humahuaca  (Tilcara, Maimará  y Tumbaya)  bajaban  camiones transportando
quebradeños e indígenas de Juella (conocidos como Semilantes) ataviados con sus trajes típicos y portando
sus cajas, erques, bombos y anatas.
Desde Volcán bajaban los mineros.
Leñadores y campesinos, obreros tabacaleros y gente de la ciudad, iban aproximándose por cualquier
medio. Impresionante y heterogénea multitud se acercaba a pie, montada, en sulky o automóvil (silenciosa,
obstinadamente ).
A las 16 horas, más de dos millares de personas  rodeaban el lugar elegido: la «piedra grande» del
camino de Yala.
Llegó Silo al lugar desde una quebrada y trató de exhortar a la gente a la desconcentración. En ese
momento la policía se acercó para silenciarlo.
La tensión crecía...
Silo comunicó entonces su decisión de partir y se dirigió a un vehículo ubicado en las inmediaciones,
desde donde saludó a la gente que lo seguía.
Lentamente se fue alejando entre dos columnas de silenciosos campesinos que alargaban sus manos
para dárselas a Silo.
En ese preciso momento se producía la conquista de la Luna por el ser humano. En los cielos triunfaba
la técnica y en la Tierra se ahogaba el espíritu. En un punto de la Tierra desconocido para la atención
mundial, en un paraje ignorado de América del Sur un hombre vestido de overol blanco, enmudecía.
Al atardecer, Silo lanzó por cinta grabada un mensaje que fue regrabado y entregado a varios peregrinos
de Perú, Bolivia y el norte de Chile.

“Una vez má, la persecución y la violencia impiden que nuestra palabra llegue hasta las gentes que la esperan.
Cambian los gobiernos y sus hombres, pero la persecución y la violencia continúan.
Esta oligarquía clerical encabeza la persecución. No sólo ha recurrido a la calumnia como habitualmente lo hace, no sólo ha tratado de forzar al poder civil a fin de lograr nuestro encarcelamiento como lo ha hecho en  otras  ocasiones,   no  sólo  ha  presionado  sobre  los   escribas timoratos  que  temen  publicar  nuestras denuncias (demostrando con esto que reconocen el poder terrenal y corruptor de los sacerdotes). Hoy ha llegado   más   lejos,   ha   logrado   cercenar   la   facultad   de   comunicación   del   hombre   con   su   hermano,
maniobrando con no sé qué argucia legalista. Si esa argucia vale, que  cierren entonces  sus templos y silencien sus sermones públicos, de esa manera estaremos todos en condiciones de meditar en silencio.

Estos sacerdotes paganos encabezan la persecución y la violencia. Así lo hacen porque toda denuncia
pública contra ellos debe ser acallada.
La  palabra  que  hoy  ahogan  será  escuchada  en  el futuro,  pero  sus  palabras  serán  ahogadas  para siempre.
Esta   oligarquía   clerical,   anticristiana   y   pagana   ha   entendido   que   su   reino   es   de   este   mundo.  
Ha entendido que no puede repartir sus bienes entre los pobres.
Por consiguiente habiendo falseado su destino, de ella no ha de quedar en pie sino el recuerdo de una
casta oprobiosa que trató de dividirse para subsistir, en dos líneas igualmente malintencionadas: la de los jerarcas conservadores y la de los politiqueros arribistas.
Yo digo que desde hoy, habiendo salido el hombre de esta Tierra hacia otros mundos, hacia el cosmos, sólo hallará equilibrio en la Religión Interior.

Desde hoy, toda religión que apegue al hombre a cultos y ritos, miente.
En otras épocas el espíritu necesitó de apoyos, pero hoy se apresta a marchar solo, sin custodia de
sacerdotes, sin cercos de templos.
Únicamente la Religión Interior servirá a los hombres en su evolución futura.

Dios ha muerto en los templos, ha muerto en las imágenes, ha muerto en sus representantes... pero ha
renacido en el corazón sencillo del hombre americano. En esta América, continente largo, por fusión de pueblos y de razas nace un contenido y un significado
para devolver al mundo.
América helada y abrasada, desierta y plena, encrespada y hundida, ha sonado la hora de tu misión.
¡Despierta y levántate!

...Allí, en los otros continentes el paganismo hace desiertas a las ciudades pobladas y el desierto crece
cubriéndose de escombros y de máquinas.
También la máquina será bendición cuando los hombres cuenten con el espíritu de América. Hoy se trata de liberar el espíritu de América. Pero esa liberación violenta que predicas, es una nueva división en la conciencia del hombre americano.
Tú quieres sacudirte el Imperio mediante la fuerza, y a él le interesa que uses la violencia porque así te divide.
No des coces contra el aguijón, porque éste más se aguza mientras tú te hieres.
Si tú y tus hermanos se unen en una misma fe, ¿a dónde clavará el guerrero su aguijón?
Cuando una misma idea sople como huracán por toda América, no habrá imperio en el mundo capaz de mantenerla esclavizada...
Sé que todavía no me comprendes. Te preguntas:
¿Cómo es posible que una religión interior hermane a los hombres? ¿Cómo es posible que a la opresión
y la violencia se las derrote por medio de la Paz?
Cuando  todos  los   intentos   sean  gastados,   cuando  tu   vieja  lucha,   esté  perdida,   buscarás  la   paz   y entonces la violencia será dentro del Imperio y caerá.
Pero comprende bien: todo depende de tu liberación interior, de tu paz interior. El resto se producirá a consecuencia de ello”.


20 de Julio de 1969



julio 19, 2013

Del libro "Imbéciles!" - Silo *8





Los años han pasado.

Muchas potencias  se han  ido desplomando  en torno a C.M.M.P. y se ha
formado una compacta Liga de Naciones.

La  producción   aumentada  en   todos   los   órdenes,   ha   elevado
extraordinariamente el nivel de existencia.

Toda  la   legislación  del   Cuerpo  de   Naciones  esta  rígidamente
codificada. Cualquier  conflicto es  dirimido por  la máquina "cargada
con leyes". Los cuerpos colegiados en la administración de la justicia
han desaparecido.

Se logró crear vida en los laboratorios.

Gentes y  animales rescatados  de las nieves, muertos ciclos de tiempo
antes volvieron a vivir.

Investigadores de  edad avanzada  fueron  colocados  en  cámaras  para
funcionar ciclos  después, cuando  la juventud  haya  sido  prolongada
indefinidamente.

La especialización se intensifica.

La división racional del trabajo logra una situación estable.

El régimen  patriarcal de la familia actuando como célula social, como
institución fue aniquilado.

La eugenesia  se ha  engrosado de tal manera que controla y distribuye
las relaciones entre hombres y mujeres.

Enfermedades y defectos físicos no existen...

"A diez  ciclos de  la transformación social, a lo largo del Cuerpo de
Naciones  se  ha  verificado  casi  la  liberación  definitiva  de  la
comunidad.

"Al mal  económico, fuente  de todos  los males se lo destrozó con una
adecuada distribución de los medios de trabajo.

"Los adelantos  técnicos logrados  permiten  hoy  asomarnos  al  mundo
sideral. Nuestras bases giran ensortijando el planeta.

"¡Hemos cambiado el rostro de la Luna!

"Orden social y sistema político instaurados por esos creados geniales
que  nos   dirigen  son,   podemos  proclamarlo  con  absoluto  rigor:
¡perfectos!

"¿Pudo el  hombre en  cualquier época  llegar a concebir tal estado de
equilibrio, y al mismo tiempo de progreso?

"Ya no  necesitamos del  mito. La anticuada metafísica no puede darnos
soluciones, sólo la ciencia puede hacerlo, m s allá  del tiempo.

"La creación  está  en la técnica. ¡Han muerto los falsarios! ha muerto
el arte.

"Los corifeos  religiosos y  sus fanáticos seguidores se han segregado
de nuestro  territorio o  han terminado  en el  suicidio. Sin  embargo
advirtieron un hecho: ¡los inútiles no pueden vivir con el progreso!

"En lapso  muy corto  se han borrado del cerebro humano las huellas de
la religión...

"Va llegando el tiempo en que la m quina no requiere de los operarios.
Ahora pueden dedicar su tiempo a especializarse m s intensamente.

"Antes nuestros  obreros perdían el tercio de su existencia durmiendo,
hoy  la   bioquímica  ha  solucionado  el  problema  ensanchando  como
consecuencia el margen vital.

"El avance científico se proyecta sin límites ¡nada podrá  trabarlo!

"Simultáneamente los  pueblos excluidos  por ellos  mismos del sistema
involucionan hacia  el salvajismo.  ¡Somos los  llamados a  establecer
definitivamente el orden!

"El mandato  sea: ¡Ciudadanos  de la  Liga de  las Naciones  salvad al
resto del mundo sometiéndolo¡".



*



Un lago muy dilatado. Al final y en semicírculo montes azulados por la
distancia. Próximo, el bosque alto.

Irene y  sombra de  siesta. Acostada  en el verde los dedos juegan con
una flor blanca, la otra mano descansa alargada como su cuerpo.

Un hombre  camina lentamente  desde la  arboleda. Parado  ante ella la
contempla con  gran expresividad, con aire de reencuentro intensamente
deseado.

Ella lo  ve como  a un  objeto más,  pero luego  lo observa  y  sonríe
afable.

--Ciudadano usted también...-- pero es interrumpida.

--¿Cuántos hijos  has tenido,  Irene?-- Pregunta  él manteniéndose  en
idéntica posición.

--Hasta ahora tres... ¡no lo recuerdo a usted ciudadano!-- aclara ella
conservando también su inmovilidad.

--Hace mucho  tiempo querida  mía, cuando  no eras tan pobre... cuando
podías descubrir lo bello acá  mismo en la tierra obscura, en el rastro
que dejan los animales pequeños...Hace mucho tiempo... --Sentado junto
a ella  que permanece estirada y quieta, él se reclina y levanta luego
a la altura de su pecho la cada vez m s blanca mano de Irene.

--...Ahora tan pobre... ¿Qué haces sola por estos lugares?

Un tanto perpleja responde:

--Cambio de  aire,  de  objetos...¡Está   dentro  del  plan  ciudadano!
pero...

--¡Qué pobrecita!-- lamenta él con enorme piedad.

Y las l grimas caen tibias sobre las manos blancas. Entonces el cuerpo
de la mujer cobra vida, se incorpora...

--¡Lloras!-- advierte  Irene... y  sorpresivamente se siente disparada
como un proyectil arrojada contra la naturaleza.

Los labios  de ambos  se juntan  y ella  es rozada  por los  pasos que
cortaban las  noches frías,  por las  manos y la mirada... tristísima.
Sin poderlo  remediar su  mente se  deshace en  recuerdos  extraños  y
aparece otra  vida que  no recuerda...  ¡pero que fue vivida! Baila en
ritmo salvaje  y transporta  círculos;  triángulos...  Desesperada  se
aleja de  los labios  de Az,  pero el  horror al vacío hace que se una
nuevamente a él.

Entonces aparece  una escalera  con bordes  muy rojos  perdida  en  el
infinito del cielo azul.

Llenos de  luz y de llanto sus ojos se abren. Los labios se despegan y
 vida, temblorosa, pregunta:

--¿ No son buenas las cosas que ha hecho el Hombre?--

El sin responder apaga su mirada lentamente...

"Vió entonces  subir al Hombre por la escalinata y en una de sus manos
vió el ave con humo aún de las ciudades humeantes.

"El ave, la m quina, el monstruo, ahora ¡recién ahora! estaba dominado
beneficiando a su creador.

"Az se  detuvo un  instante  en  el  ascenso  para  sonreírle  y  ella
comprendió que no estaba sola, que las gentes empezaban a vivir...

"Súbitamente la  naturaleza en  el aire, en la tierra, en el agua y el
fuego se  impregnó de  una  substancia  parecida  a  aquella  que  los
primitivos llamaban amor.

"Entonces la  antigua música  creció, se  inundaron todas las cosas de
luz purísima y aparecieron fulgurantes las aristas de todos los seres.

"Retumbaron los  montes y  los valles, se estremecieron los mares y el
Hombre alzando sus brazos rugió imponente: ¡Despierta ya universo!"



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Sale del bosque. Ya nos es A-Z, es cualquier otro nombre.

Montes lejanos, agua, verde y ... alguien.

Se detiene. Ella bajo un  árbol duerme.

"Elohnh. ¡Oh,  Irene! Diosa  de la  paz ".  Un enorme recuerdo... pero
ella no es Irene, es cualquier otro nombre.

Calma la  sed. El  espejo del  lago llama  a los  tiempos perdidos. Su
frente no es joven.

En sus  manos el  agua fresca, en su rostro el viento, en su cuerpo...
cansancio.

Allá , caminando  a la  ciudad. ¿Será   posible? la enorme ciudad nueva;
vieja. Hombres iguales.

Caminando. Ojos cuajados de tristeza.

Horizonte rojo. El sol hundiéndose. El sol en su ocaso...




LA PRIMERA EDICION DE ESTE
LIBRO SE TERMINO DE IMPRIMIR EN LOS TALLERES
GRAFICOS D'ACCURZIO, DE CALLE

BUENOS AIRES No 202, DE

LA CIUDAD DE MENDOZA,

EL DIA 29 DE ABRIL DE
1959







julio 16, 2013

Del libro "Imbéciles!" - Silo *7





Así caminando  por la  galería metálica  se  acerca  al  tope  que  se
descorre en  silencio. Avanza  unos pasos  siguiendo a  su guía  y  se
encuentra en  el interior  de un compartimento semicircular en el que
convergen cuatro o cinco pasadizos similares al anterior.

El guía  golpea sobre una l mina de hierro colocada a modo de puerta y
ésta se abre.

En el interior del recinto (que tiene todas las características de una
sala de estudios) se encuentra un individuo que invita a pasar a Zoam.
Este lo hace mostrando seguridad. Se cierra la puerta y quedan solos.

Con grandes  pasos se  acerca al  recién llegado extendiendo su mano y
presentándose como  B... Luego  de aspirar profundo y corto comienza a
desarrollar su  motivo: "hace  exactamente cuatro  meses exhortamos  a
usted y  a su  compañero a dirigir el organismo principal del cinturón
revolucionario". Indica  con un  gesto un  asiento y luego se ubica de
pie tras un escritorio amplio, bajo, obscuro.

"No desconocemos las medidas tomadas en contra de nuestra organización
por el  gobierno de  policía, ni desconocemos la vigilancia severa que
ha desarrollado  en torno  a ustedes  y sus colaboradores próximos. No
ignoramos tampoco la campaña difamatoria que se extiende aún fuera del
territorio de C.M.M.P. dirigida hacia nuestros simpatizantes".

"¡El pueblo  que necesitamos  está  engañado! Las fuerzas de propaganda
desarrollan en  las masas  hábitos curiosos...  pero en este caso esos
hábitos nos hacen guerra".

"Bien, hombres  de  probada  superioridad  necesita  el  movimiento...
suponemos que  las medidas  tomadas por  el  actual  gobierno  no  han
influido en  vuestro ánimo".  Y al  marcar la última palabra lanza una
mirada ansiosa buscando los ojos de su interlocutor.

--Señor, el  problema se  ha tornado  ya muy  complejo.  No  creo  que
podamos ayudar.--

En el rostro de B...se percibe un fuerte impacto. Vacila un instante y
con un  movimiento de  todo el  cuerpo, un  movimiento en  el  que  se
traduce el intenso desaliento, balbucea:

--Pero... es  que no comprende la gravedad de la situación... el deber
patriótico que...

Zoam cierra los puños lentamente y con voz uniforme:

--El problema  es de  otra índole,  no toca  en nada  a la técnica del
movimiento. En  otras palabras  tiene  poco  que  ver  con  la  acción
revolucionaria en sí.--

--Comprender  lo difícil de su situación--

--¡Perfectamente!--

--Necesitamos sin embargo explicaciones claras.--

Zoam retoma:

--Es una  dificultad de tiempo. Varatemón mi "compañero" como usted lo
llama, est   en trance  de solucionar  el problema.  Ahora o nunca. No
aparecer  jamás la misma situación, la misma oportunidad--.

--¿Qué problema, qué situación?-- gruñe enrojecido B...

--En fin, el intríngulis est ... ¡Sería de no acabar!

--Bueno, esto  no es  satisfactorio, ya  volveremos sobre  el  asunto.
¡Acompáñeme!

En la  cara rústica  del hombrón  se perciben  todos los  rasgos de la
tolerancia obligada.  Mientras camina unos pasos trata con una mano de
agrandar el  cuello de  la camisa,  sin duda  cree que  esa presión lo
congestiona. Luego abre con violencia liberadora una puerta lateral de
la pieza.  Ambos salen a un terrado desde el cual se domina el estadio
muy amplio.
Un montacargas desciende con ellos hasta el campo de deportes.

Cierto viejito  estúpido pasa  cerca conduciendo  un raro tractor y se
ubica en el mismo ascensor subiendo luego.

El cambio de escena ayuda a B... Su problema anterior parece relegado;
circunscripto a un pedazo oscuro de su mente. Con gesto grave asume el
papel de maestro:

--Estas construcciones y en gran medida la operación, sobre todo en lo
que toca  a  material  de  guerra,  est n  financiadas  por  potencias
amigas.-- Y  elevando la   áspera manaza  en gran  ademán agrega: --¡No
hablemos  por   supuesto  de   la  solvencia   que   poseen   nuestras
instituciones paralelas y nuestros destacamentos subversivos!

Espera  un  tiempo  e  insinúa  acompasadamente  --¿Cree  que  podemos
fracasar?--

--¡Creo que no!--

--Aún no  lo entiendo...--  Esto lo dice muy despacio, casi deprimido,
luego se  repone y  señala --¡Aquellos marcadores electrónicos indican
los puntos que alcanzan nuestros hombres!--.

B...  decide   llevar  a   su  acompañante  sobre  algunas  cuestiones
generales:

"Observe, superan  los dos metros en salto en alto, los ocho en largo.
En esa  categoría mediana elevan pesos sobre cuatrocientos kilogramos.
Los récords  mundiales vigentes en cien metros llanos, cuatrocientos y
mil quinientos  son alcanzados  por casi  todos los  hombres  de  los
numerosos equipos de asalto".

Suben luego  por una  rampa que se corta en el campo de tiro con armas
livianas:

"Acá  reciben  el entrenamiento  diario, luego  son  instruidos  en  el
combate  callejero   con  gases   venenosos,  granadas  y  lanzallamas
portátiles".

Siguen avanzando hasta llegar a un  gran gimnasio.

"En fin,  la gimnasia  les hace  coordinar fuerza con agilidad, les da
equilibrio, resulta  la disciplina de síntesis. Debo hacerle notar que
a estos entrenamientos y a otros muchos se someten ¡todos! los hombres
y como  usted sabe  hay diez  células similares  a  esta  distribuidas
alrededor de C.M.M.P.

"A nuestra  izquierda, las  aulas  de  adoctrinamiento,  en  ellas  se
utilizan las  proyecciones cinematográficas, las maquetas, los planos.
Ahí se  capacita técnicamente  a nuestra gente en el funcionamiento de
motores, usinas,  en la  ubicación de  redes eléctricas  subterráneas,
gasoductos, centrales  energéticas en general, radioemisoras, etc."

"El  adiestramiento   descansa  sobre   el  principio   del  individuo
técnicamente suficiente  y físicamente  completo. Sin  embargo en este
tipo de luchas especializar excesivamente es fraccionar a quien actúa.
Los grandes  especialistas son  los jefes que calculan todo, los demás
funcionan sin necesidad de comprender profundamente las estructuras de
aquello que  tocan sus  manos, basta  que reconozcan  y  accionen  con
eficacia".

"¡Esto  no   debe  comprenderse   como  una   guerra  sino   como  una
Revolución¡".

"Todos los  individuos de  la célula  son ciudadanos  del C.M.M.P. que
poco antes  del momento  ir n a  ocupar sus  lugares habituales en las
ciudades."

"Al frente en ese monoblock se encuentran las habitaciones; comedores,
servicios médicos, salas de esparcimiento".

"La forma  de alimentación vitaminizada, los horarios, la movilización
se ejecutan  al detalle  siempre bajo  una jerarquía rígida respaldada
por un efectivo sistema de observación y custodia".

"¡Fue difícil  la selección en los primeros tiempos! todo era estudio,
tests físicos  y mentales,  cuestionarios...y luego  el habituar a los
escogidos a  esa nueva  forma de  vida. El  llevar a la realidad todos
esos diseños teóricos... ¿Cree que fracasaremos?".

--¡Creo que no!--

Mientras Zoam  se encuentra  muy lejos  le son  explicados detalles de
capacitación física,  entrenamiento  a  obscuras,  uso  de  vidrios  o
anteojos de  contacto contra  gases venenosos,  filtros  centimétricos
nasales. Detalles  de desplazamientos  y acción. Números de efectivos,
estadísticas, estudios  sobre probabilidades.  Les son  expuestas  las
investigaciones del  laboratorio de  psicología experimental sobre las
vibraciones de colores y su aplicación a los estandartes, el efecto de
los sonidos, explosiones y en general de las proyecciones de la guerra
violenta sobre la mente normal.

Se le  señala el  trabajo de  los talleres  de electromecánica en la
fabricación  de   pequeños  transceptores   operando  en   frecuencias
ultraelevadas, en  frecuencias de  milímetros. En fin, le es explicada
la gran m quina sediciosa en su aspecto técnico.

B...destaca dentro  del plan  general la paralización del Ejército del
Gobierno policíaco  mediante una  hábil "huelga  al servicio  militar"
desatada  en  el  momento  de  incorporación  de  la  clase  ciudadana
subsiguiente. Habla  luego de  la desorganización de los Ministerios y
de los  viejos recursos  de la  huelga general  revolucionaria, y  del
saboteo, también  del terrorismo  lanzado contra  la  familia  de  los
enemigos.

Termina explicando  la acción  de las  organizaciones paralelas y todo
por último  recae sobre  el cinturón revolucionario y la dirección del
mismo.

--¡Necesitamos su  ayuda! La  oposición conoce muchos detalles y sabrá 
defenderse--.

--Sin nosotros podrán lo mismo. ¡Está  todo dicho!--

B...cambia de actitud y en gesto conciliador anuncia:

--Este ataque  puede destruir  cuatro o  cinco potencias  similares  a
C.M.M.P. Sin  embargo, la  intención del  Cuerpo Directivo se mantiene
oculta. No  sabemos qué  amplitud puede  alcanzar todo  esto, por  eso
necesitamos precisión.--  Soslaya a Zoam y viendo que éste se conserva
impasible  todo  se  torna  cólera  reprimida.  --¡Mis  jefes  ordenan
retenerlo a  usted el  tiempo que  sea necesario!  Debo agregar que su
compañero se encuentra en camino fuertemente custodiado--.

En ese  momento est n  en el lugar del cual salieron juntos. Se cierra
la puerta con fuerza. La figura de B... ha desaparecido...

Las calles  son regueros  de explosivos  y  sangre.  En  los  alambres
telefónicos caídos  se enreda  una chaqueta.  En un  poste pedazos  de
carne humana, pedazos de cuerpos destrozados se adhieren y chorrean.

Allá  gritando: "¡Por Dios!" desesperado, cae deshecho cualquier hombre
y en  tanto que  el olor  a luto  se expande  más y más brama el pecho
huracanado del fanático.

Acá  entre  hierros retorcidos  se ahogan los gritos y estertores de la
anciana ajena  a todo,  que muere  achicharrada...su brasa  hierve, se
incendia y luego carbón.

Flamean las banderas de las hordas y el ritmo delirante de sus voces y
pasos da  vida al aletargado monstruo de la catástrofe. "¡Sube furioso
imbécil! ¡El instinto gregario de las bestias reunidas como bestias te
levanta!

"¡Oh, palingenesia. Repetición de la violencia!".

...Las paredes  de la  pieza parecen cerrarse, el aire falta, el calor
aumenta y con él la fuerza de los coros y del rojo fuego...

Varatemón también est  allí, al lado de Zoam. La situación se reduce a
esto: Esperar,  absoluta impotencia o resolver toda esa fórmula mental
que aprisiona.

Zoam respira  entonces y  se encuentran  libres, nuevamente  sobre  la
arena de la playa.



La casa de Irene



IRENE: Me llevo el automóvil, vuelvo creo que mañana.

MADRE: Es  peligroso...los anunciadores han dicho que desde ayer tarde
en todo el territorio...

IRENE: Siempre igual...¡Me voy!

PADRE: ¿Aún no traen el detalle de compras? Etcétera.

El vehículo  se detiene  frente a  una casa.  Se abre  una puerta.  Un
hombre joven,  poco atlético se acerca alegre; pregunta a Irene con un
gesto y luego toma el volante. Parten.

--¿Cuándo volvemos?-- pregunta él.

--No sé, mañana--.

Escudriña el rostro de Irene e indaga cortamente:

--¿Se te ocurre algo?--.

Ella contesta respaldándose:

--Antes de  llegar, aparta  el coche  sobre la plataforma, al lado del
camino. Quiero ver toda la ciudad--.

...Mientras Irene  dormita entran al jardín que rodea la casa antigua,
grande. Se detienen. Ya es noche.

--¡No me avisaste!--.

--Dormías--.

Entran. F...enciende  las luces  de la  sala. Una  araña adornada  con
innúmeros caireles,  el techo  muy alto, en fin, los muebles de época.
Resalta el hogar de leña.

Ella entra  en la  cocina y  con familiaridad  extrae de los anaqueles
alimentos y vajilla.

Irene comenta despreocupadamente:

--Tus caseros ordenan bien las cosas.--

Transcurren seis o siete horas...

Como un  ariete, de  golpe las  turbinas de un avión que pasa muy bajo
sobresalta violentamente a la pareja. Los vidrios se estremecen.

Un  tiempo   después  la   iluminación  de   una  habitación  contigua
desaparece. El  tocadiscos pierde  velocidad, la  música  llega  a  una
lentitud grosera y luego silencio. No hay energía eléctrica.

La luz  del hogar  llega a  la habitación. El rostro de F...se perfila
débilmente, horizontal, quieto.

--F..., querido, salgamos, tengo miedo.--

--¿Adónde quieres ir?--

--A casa...Tengo miedo.--

--Estás conmigo.--

--Sí...--

Evidentemente preocupado  F...comienza a  explicar: "La última parte ha
sido ya  realizada, el  golpe está   dado y  eso es todo. Hace días que
empezó el  movimiento y  a muerto  mucha gente,  supongo que  ahora ha
muerto mucho más. Sí, no cabe duda, la revolución ha estallado.
Acá  estamos  lejos de  la ciudad, no hay peligro, además qué podríamos
hacer".

--Mis padres...--

El le acaricia el cuello largamente y después le reprocha con ternura:

--Pensemos en  nosotros hasta  que salga  el sol,  mañana tal  vez  no
podremos...Pueden ser nuestros últimos momentos juntos.

Irene se acerca al rostro de F...y su voz muy débil suplica:
--¡Cuéntame cosas!--

El alza la voz con fastidio:

--¿Qué cosas?--

-¡Háblame de...tus amigos.--

--¡Bah!--

Ella insiste pero casi justificándose:

--Tus amigos, conocidos tuyos, algo puedes decirme.--

--...¡Hijos de puta!--

Afuera de  la casa  en el corredor, el maullido de un gato como llanto
de niño se intensifica desproporcionadamente.
En el  interior los  reflejos del  fuego  y  las  sombras  transforman
progresivamente la  cara de él que parece dormir. Las comisuras de sus
labios se  acentúan, los pómulos se agudizan y el conjunto adquiere un
profundo carácter  de sufrimiento. Es un rostro que jamás perteneció a
F...

Sin ver  sus ojos  Irene absorbe  una mirada  intensa  clavada  en  el
tiempo, una  mirada lejana  enormemente triste,  infinitamente sola  y
anhelante. Siente  el cuerpo  caliente del  hombre  joven...  pero  la
mirada ya  no concuerda  con la  imagen que  se desdibuja, con eso que
permanece ahí  a su  lado, regordete.  Ahí está   F...no con el agudo y
casi cortante  olor a  carne, a  sangre,  a  naturaleza.  Está   F...un
complemento de  situación con  olor a  hombre vulgar;  sin mirada.  No
obstante se acerca más a él y lo siente más.
F...sin despegar los párpados gime:

"He estado pensando Irene, no sé qué puede pasarnos dentro de un rato,
no tenemos  seguridad... que  son tres  o  cuatro  horas...Me  molesta
tenerte conmigo  no poder  movernos fuera de todo lo que esta  pasando.
¡Me molesta  no poder  complotar contra  algo!...Sin duda  iremos a la
ciudad".

--¡Tengo que ir!--

--Así y todo...--. Su voz se ha soltado hueca y equívoca.

--Regresemos ¡vamos ya!--

--¡No!...no, todavía  es de  noche.  He  estado  pensando,  hay  cosas
perdidas que  aparecen. Recuerdo  cuando  iba  al  Instituto  toda  la
semana, desde  la mañana  a la  noche; sólo  la tarde  del jueves  era
libre. Desde entonces se me aparece no sé si porque esta  ubicado en la
mitad de los siete días o por el campo y el sol que me recuerda, se me
aparece el  jueves como un día amarillo claro lleno de luz. No sé como
explicarte que estas cosas pequeñas llenan todo... Hoy ya es jueves.

--Querido, abre las persianas.--

F...se incorpora,  toma del  velador un  paquete  de  cigarrillos,  da
algunos golpecitos  y extrae  dos. Pone uno en boca de Irene. Por tres
veces las  chispas muy  blancas  enceguecen;  acerca  el  fuego  a  la
muchacha, luego  hacia él;  se ilumina el rostro, el pecho y sus cejas
sombreadas forman un arco m s intenso.

Se apaga  esta luz  y quedan  destacados el  amarillo mortecino  y dos
brasas, una se mueve.

Un girar viejo y metálico. Las contraventanas se abren.

F...eructa  varias  palabras  aglutinadas  incomprensiblemente,  luego
aclara preguntando:

--¿Viste el aerolito...largo?--

--...No, ¿por qué no vienes?...acércate.
Se nota  la silueta  de F...apretada al marco de la ventana. Enseguida
él destaca hablando bajo:

--Est  muy despejado el cielo.--

Ella aspira  humo largamente y siente un prurito marcado en la punta y
en la base de la lengua. Luego esta en una casa, un club.

Hay mucha luz. Gente que baila...

Alguien: ¡Año nuevo!

Irene: (¡Cretino!) ¡Viva! (No esta  J...)

Toma un vaso tras otro de alguna bebida.

La gente molesta en su camino. J...decididamente no esta  allí.

Un cargoso que esta  cerca pregunta:

--¿Si tuviera que construir su casa dónde...dónde querría levantarla?-
-

Irene lanza  una bocanada  de humo  sobre las  manos que sostienen una
copa ante su cara...

Se encuentra ahora en la pieza. F... en idéntica posición.

Descubre que  las manos  del recuerdo  tienen la  misma potencia de la
mirada que antes imaginó; entonces regresa al club iluminado.

--...¿dónde querría levantarla?--

--En la cima de un monte...posiblemente.--

La mirada  de ella se adhiere a las manos y busca a todo el hombre que
tiene ante sí pero la faz esta  borrosa.

Ya de  día él  la acompaña  a su  casa. Es  muy temprano,  el  sol  se
refleja. Los pasos de ella y los otros pasos.

La imagen se esfuma.

En las  noches frías a altas horas, siente en la acera bajo su ventana
los mismos pasos mucho más lentos.

Nuevamente se  halla en  la habitación.  F...se aproxima sobándose los
brazos y comenta:

--Tengo frío.--

--No me respondes ¿qué pasa con tus amigos?--

--Es mala gente la que me rodea, además...--

F...aparece en  una calle de suburbio. Un bar que permanece abierto se
acerca lentamente.  Se abre  la puerta.  Olor a  aceite  quemado.  Las
paredes  violáceas.  Hay  poca  luz,  las  lámparas  eléctricas  estan
cubiertas por una capa marrón grasosa.

En el  fondo y  a la  derecha un  borracho  desgarbado  hace  inútiles
maniobras para fumar un lápiz.

En otro  punto cierta  ramera, al parecer desdentada, ríe frente a una
jarra de vino y frente a un individuo de cuello y pelos negros.

Hacia el centro del local ante una mesa, un hombre maduro algo canoso,
inclina la  cabeza reflexivamente mientras apoya su actitud mental con
un vaso golpeándolo rítmicamente sobre la madera roja.

Hay otras dos o tres personas.

F...se sienta  tras cualquier  mesa y evidencia inmediatamente un gran
alivio. Un sujeto apoyado en el mostrador lo observa con prevención.

Así permanece  unos instantes  alejado del cansancio y del fracaso que
sumándose años y años fue a cuajar en ese preciso día.

Luego los ojos retoman. El piso esta  sucio con desperdicios y líquidos
que forman  charcos apretados.  Una vena  de su  mano  izquierda  late
despacio. En  una pared:  "No se  acepta... Prohibido..."  etc.  Y  la
mirada concluye  en el  hombre de  la  mesa  roja.  Queda  un  momento
estudiándolo, buscando en él rasgos afines. Por último F...se levanta;
puede sentir  el golpeteo  del corazón,  ya esta a un  metro y.. .¡La
mirada del hombre lo ensarta! Vacila... Sigue avanzando, por fin cerca
de él dice apretadamente:

--Señor, no  lo conozco  a Usted,  pero hoy  me encuentro  ¡muy  mal!.
Quisiera que...-- y hace entonces ademán de sentarse.

El individuo  se levanta bruscamente y lo mira muy de cerca,  ofuscado
mientras dilata y contrae los músculos de la mandíbula.

Recién nota  F...el color  de la  corbata, el  anillo con  una  piedra
grotesca; la transparencia de los ojos y por encima de todo esas cejas
despobladas y acusadoras.

--¡Camarero!-- grita  el hombre  sin apartar la vista de F...que ya ha
retrocedido unos pasos.

El sujeto  que estaba  pegado al  mostrador se  acerca bamboleando  un
trapo. F...da media vuelta y se dirige hacia la puerta.

El camarero agitando un brazo exclama:

--¡Hay muchos como ése! ¡Los tendrían que tirar al agua!--

Resaltan de bruces las impúdicas carcajadas de la ramera.

Se abre la puerta un instante estrellándose luego...

F...est  ahora junto a Irene. Sus manos transpiran.

--¿Sigues con frío?-- pregunta ella.

--¡No!--

Pasan dos horas y el amanecer entra por la ventana.

F...decide:

--¡Irene, no vuelvo a la ciudad!--

(Murmullo).

Unos minutos después él agrega:

--¡No quiero que vayas tú tampoco!--

--Necesito saber qué ha pasado en casa--

--Yo también tengo familia...--

Ella aclara indignada:

--¡No es por mi familia!-- Deja pasar un instante y luego

--Tengo sed.--

--¡Vamos!...tomemos algo.--

Es avivada la hoguera y se ven dos sombras muy próximas fluctuar en la
pared.

Luego de  una intermisión  Irene acerca  a F...una  taza  con  líquido
caliente.

En la  pared antigua  muy alta se proyectan las figuras de una mujer y
un hombre  llevando algo  a sus  lados.  Est n  al  parecer  mirándose
enfrentados...

......................................................................
..................



Irene disminuye  la velocidad  a medida  que se  acerca al  puente  de
hierro. Un camión bloquea casi toda la carretera.

Súbitamente el  traquido de  algo la  hace frenar  con brusquedad. Muy
excitada comprende  que alguien  ha descerrajado  un balazo.  Desde un
bulto de  gente tres  hombres armados  se  acercan  corriendo.  Tienen
sendas chaquetas  de la  misma forma  y color.  Próximo al auto uno de
ellos grita amenazante:

--¡Descienda!--

Irene baja presurosa y una vez en tierra se le exige:

--¡Identifíquese! ¡¿Hacia dónde se dirige?!--

Gusto a  fósforo llena la boca de la muchacha; sus piernas vacilan; la
vista no se acomoda bien a la distancia de los objetos. Necesita aire.
Todo configura  el estado  anterior al  desmayo... pero  se apresura a
responder:

--Vuelvo a  la ciudad...¡la  tablilla del  coche muestra  que  soy  de
aquí!--

--¡Muestra que  el coche  es de  aquí!-- corrige  la cara  recia --¿No
posee documentos?--

--No, no los traigo conmigo.--

Uno de  los  guardias  ha  terminado  de  requisar  minuciosamente  el
automóvil:

--¿Qué es lo que sucede?-- pregunta ella ingenuamente.

Uno que  parece ser el jefe la mira desde arriba y sonríe corto, luego
ordena:

--¡Tú protege a la ciudadana!--

El guardia  que había  revisado se  ubica en  el asiento  trasero  del
vehículo y apoya un arma larga sobre el respaldo.

El jefe  abre la  puerta próxima  al volante,  luego investiga  con la
mirada a Irene y decide:

--¡Suba!--

Ya en marcha ven cómo el camión retrocediendo deja paso libre.

Irene indaga a su acompañante:

--¿A dónde vamos?--

--­A su casa!--

Ella va sorteando obstáculos, restos de destrozos que han aparecido en
las calles. Los piquetes armados son traspasados gracias al hombre que
desde su asiento presenta cada vez cierta documentación.

Al pasar  por una  de las  guardias se les une otro miliciano que toma
lugar al lado de ella.

Hasta ese  momento sólo  se han  visto objetos quemados o fragmentados
por la  lucha, pero  al rodear  una plazoleta  aparece lo horrible, lo
humano; vejado, rodeado de carteles con inscripciones drásticas.

Irene advierte vibrando que su casa esta  próxima...

Detiene el  auto. Una  cortina se  descorre apenas en la ventana de la
planta alta.  Desde allí  se observa  un dialogo  muy vivo  entre  los
ocupantes del vehículo. Por fin, uno de los sujetos pasa a la mujer un
papel.

Ella desciende y el automóvil reemprende la marcha.

La cortina est  corrida nuevamente y la puerta de entrada abierta.

Madre: (Gritando con voz pastosa) ¡Tu padre está  arriba accidentado!

Irene: ¿Qué pasó?

Madre: Tiene las piernas destrozadas.

--¡Irene!-- vocifera alguien desde la planta alta.

Madre: Te  llaman ¡sube  rápido! Tu  padre te  necesita, sabe  que has
vuelto.

Irene: No puedo subir, voy a morirme.

Madre: (Suplicando, ahogada en llanto) ¡Te necesita!

Pasa un tiempo muy corto.

Padre: Estoy  deshecho... Irene quiero que me perdones. Hija, Irene...
tu madre sabe...

Irene: (Mirándolo muy fijo) ¡No!<R>
Cae desmayada.