Fragmento de las charlas realizadas en Grecia, Corfú - 15/11/75
El sentimiento religioso está en la base de la vida misma, donde una
orientada tendencia hacia las posibilidades evolutivas de la mente.
Esta enorme fuerza que opera en el hombre supera a los instintos
básicos de conservación, empujando al siquismo a ir más alla del
límite que ponen las necesidades orgánicas.
Tal fuerza puede ser canalizada amablemente en el sentido de la
Trascendencia, pero también encadenar al hombre. Las religiones
externas son casos de traducciones deformadas de este sentimiento, al
exponer objetos externos para completar a la conciencia. Las falsas
místicas también han malinterpretado el fenómeno, con oscuras
traducciones.
Teniendo esto en cuenta y lejos de toda fetichización, pueden
observarse las enseñanzas de los grandes maestros para comprender el
clima que campea en Sicología Trascendental.
Este sentimiento se registra cuando la conciencia actúa con calma,
atención y vigilancia sobre sí misma. Surge así el interés por
este punto, interés que permite comprender el trabajo de Escuela en
su contexto no profano sino altamente religioso.